Breve reseña de un ambicioso proyecto:
El Programa Goes: Los antecedentes del Proyecto Habitar Goes y la participación ciudadana en la zona 3, en las palabras de Walter Cortazzo, quien fuera Secretario político de la zona 3 desde 1990 al 2000:
«En 1990, con motivo de la formulación del 1er. Plan Quinquenal, Cooperativas de Viviendas, integradas por trabajadores de la zona (Fábrica Nacional de Alpargatas y Facultad de Medicina), solicitaron terrenos municipales de una de las manzanas linderas al Mercado Agrícola.
Contaron desde un principio con el respaldo de las comisiones vecinales y del CCZ 3, comprendiendo a la vez que una respuesta favorable a su solicitud estaba condicionada por una solución habitacional a las familias que habitan esos predios. Estas familias, compartiendo las propuestas del programa, se organizaron en el último trimestre de 1991 en 2 cooperativas de viviendas, una de las cuales reciclaría la única propiedad rescatable de la manzana.
Además, otra manzana lindera al mercado, de propiedad municipal, tenía resolución de cesión y custodia de un área importante de la misma para cooperativa de vivienda de funcionarios municipales nucleados en ADEOM.
En síntesis, esta propuesta que comprendió al Programa Goes se concretaría a través de:
1) Realojo de la población tugurizada en un conjunto de 70 viviendas de densidad media, y del reciclaje de 18 unidades en la propiedad municipal.
2) Afincamiento definitivo de los vecinos y trabajadores de la zona, afirmando la trama social. En la misma manzana se construirán 100 viviendas.
3) Creación de un espacio verde recreativo en la otra manzana de propiedad municipal, promoviendo la coordinación de los servicios sociales y deportivos con los 3 clubes próximos al Mercado, ubicados sobre terrenos municipales.
4) Readecuación edilicia y funcional del Mercado Agrícola.
Un programa que integraba aspectos de Vivienda, Trabajo y Recreación, previéndose servicios sociales a integrarse en un futuro mediato
Con la misma finalidad descripta en el programa y en su ampliación, se hizo necesario pensar en nuevos instrumentos de gestión en favor de la recuperación integral de la zona. En tal sentido se creó una Comisión Especial que tuvo como tarea realizar, avanzar y controlar el programa
La participación ciudadana
Desde el primer gobierno decimos que la participación en el sentido estricto de “tomar parte” “sentirse parte de” es un “proceso de permanente construcción” de enseñanza y aprendizaje donde los puntos de llegada negativos o positivos son un nuevo punto de partida para comprender que el sujeto individual y el sujeto colectivo son individuos que coexisten en ambos estadios y derecho tienen en los mismos. Tanto como individuos, tanto como colectivo.
Y esto que parece “cuestionar” la representatividad, no-solo no lo hace sino que la fortifica y es una ampliación del campo de derechos y por ende de libertades.
La mirada que nos orientó en la construcción de un proyecto a largo plazo fue la cualidad de que el “espacio territorial” amplía la experiencia en la gestión de los intereses locales Fue pues una tarea de gran dedicación y esfuerzo, de gran capacidad “negociadora”, de reconocer el intransferible “liderazgo” que existen en los grupos sociales asentados desde décadas en ese lugar..
Y cuando hablamos de “liderazgo” estamos diciendo que no vamos a “orientar” o “elaborar” las propuestas participativas, sino que debemos ser constructores colectivos de los espacios donde sea la propia gente que “elabora” que “oriente” y desarrolle sus capacidades, estando bien y a tiempo “informada” y apropiada de “herramientas” no solo técnicas sino también metodológicas y vinculares que sean sencillas para que los ciudadanos se apoderen de las mismas ya que la participación” en una propuesta que va contra la corriente ya que nuestra cultura sigue basada de manera dominante en la “representatividad” o delegación.
Iniciamos este proyecto en un momento altamente propicio y a la vez de gran complejidad.»
Walter Cortazzo
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Habitargoes 